A mi entender, hay que concebir los macrocuerpos políticos que llamamos sociedades en primer lugar como campos de fuerzas integradas por el estrés, más precisamente como sistemas de preocupaciones que...
Detrás de la fachada de la ciudad moderna, sigue morando el viejo mono desnudo. Sólo los nombres han cambiado: en vez de caza, decimos trabajo; en vez de campo de caza, barrio comercial, en vez de cub...
[...] aquellos grandes cuerpos políticos que antes llamábamos pueblos y hoy, a razón de una dudosa convención semántica, denominamos sociedades. Cuando decimos esta palabra solemos pensar en las pobla...