Arturo Pérez-Reverte Quote
Son palabras del historiador Enrique Moradiellos— el control de las costumbres civiles y de la vida educativa y cultural. Casi todos los maestros —que eran unos cincuenta y dos mil antes de la guerra— fueron vigilados, expedientados, expulsados, encarcelados o fusilados. Volvieron a separarse niños y niñas en las escuelas, pues aquello se consideraba un crimen ministerial contra las mujeres decentes, se suprimió el divorcio anulándose los registrados —imaginen el desparrame familiar de semejante vuelta atrás—, las festividades católicas se hicieron oficiales y la censura eclesiástica empezó a controlarlo todo. Los niños alzaban el brazo en las escuelas; los futbolistas, toreros y el público, en estadios, plazas de toros y cines; y hasta los obispos lo hacían —ver esas fotos da vergüenza— al sacar al Caudillo bajo palio después de misa, mientras las cárceles se llenaban de presos, los piquetes de ejecución curraban a destajo y las mujeres, devueltas a su noble condición de compañeras sumisas, católicas esposas y madres, se veían privadas de todos los importantes progresos sociales y políticos que habían conseguido durante la República.
Son palabras del historiador Enrique Moradiellos— el control de las costumbres civiles y de la vida educativa y cultural. Casi todos los maestros —que eran unos cincuenta y dos mil antes de la guerra— fueron vigilados, expedientados, expulsados, encarcelados o fusilados. Volvieron a separarse niños y niñas en las escuelas, pues aquello se consideraba un crimen ministerial contra las mujeres decentes, se suprimió el divorcio anulándose los registrados —imaginen el desparrame familiar de semejante vuelta atrás—, las festividades católicas se hicieron oficiales y la censura eclesiástica empezó a controlarlo todo. Los niños alzaban el brazo en las escuelas; los futbolistas, toreros y el público, en estadios, plazas de toros y cines; y hasta los obispos lo hacían —ver esas fotos da vergüenza— al sacar al Caudillo bajo palio después de misa, mientras las cárceles se llenaban de presos, los piquetes de ejecución curraban a destajo y las mujeres, devueltas a su noble condición de compañeras sumisas, católicas esposas y madres, se veían privadas de todos los importantes progresos sociales y políticos que habían conseguido durante la República.
Related Quotes
About Arturo Pérez-Reverte
He is well known outside Spain for his "Alatriste" series of novels, which have been translated into multiple languages. Since 2003 he has been a member of the Royal Spanish Academy.